La variación de existencias
Las existencias se definen como activos adquiridos o producidos por la compañía para ser vendidos en el curso normal de la explotación. Su recuento y valoración muchas veces tiene gran transcendencia en la cuenta de resultados de la compañía
Las existencias se reconocen como gasto en el momento que se venden por ello, al cierre del ejercicio las empresas deben de controlar las existencias no vendidas, y contabilizarlas como un activo en el balance de la compañía valorando las mismas por su coste esto es, por su precio de adquisición o coste de producción o al valor neto realizable, si fuese inferior este último.
Veamos un sencillo ejemplo;
Una sociedad ha adquirido existencias del mismo producto a lo largo del ejercicio. El número de existencias adquiridas ha sido de 2.000. El precio de adquisición total de las existencias ha sido de 1.350.000 (1.000 a 500 y 1.000 a 850).
En el ejercicio se han vendido 900 unidades a 800 cada unidad (total: 720.000).
Si se considera que se han vendido las correspondientes a la primera partida, la empresa reflejará un beneficio de 270.000 (900 × 300).
Sin embargo, si se considera que las unidades vendidas han sido las de la segunda partida, la empresa tiene una pérdida de 45.000 (900 × 50).
Para evitar cuestiones como las que se plantean en el ejemplo anterior, el Plan General de Contabilidad prevé dos métodos de asignación de valor, con carácter general admite el “método del coste medio ponderado” pero también es aceptable el “método FIFO” si la empresa lo considera más conveniente para su gestión.
Aplicando el método del coste medio ponderado tendríamos que:
el coste medio anual sería el resultado de una media aritmética de los costes de entrada del periodo (existencias iniciales + compras) no realizando distinción alguna en el orden cronológico de las entradas:
Coste medio ponderado = | Coste existencias iniciales + coste existencias compradas en el período |
(nº unidades iniciales + nº unidades compradas) |
En nuestro ejemplo, el coste de cada una de las unidades vendidas sería de 500 el resultado del periodo de 112.500 (900 x 800) – (900 x 675)
Las existencias que formarían parte del activo de la compañía por no haber sido vendidas tendían un valor de 742.500: (1.100 x 675)
Aplicando el método FIFO tendríamos que:
El Método FIFO Se corresponde con el acrónimo del término inglés «first in-first out», primera entrada, primera salida. Este método asume que el flujo de salida de las existencias se produce en el orden de entrada.
En nuestro ejemplo, el coste de cada una de las unidades vendidas sería de 500 y el resultado del periodo de 270.000 euros: (900 x 800) – (900 x 500).
Por su parte las existencias que formarían parte del activo por no haber sido vendidas tendrían un valor de 900.000 (100 x500 + 1000 x 850)
Como se puede ver de aplicar un método a otro la diferencia en el resultado y en el valor de las existencias finales es de 157.500 siendo válidos ambos métodos
Cualquier práctica contable que utilice una valoración distinta a la admitida o un recuento de existencias diferente al real puede ser considerado como un “maquillaje contable ilegal” y esta práctica constituye un delito ya que implica falsedad en los documentos contables y en España, el artículo 290 del Código Penal está dedicado a este delito pudiéndose imponer penas de prisión de uno a tres años. Se entiende por falsedad tanto la omisión de datos como la consignación de datos ficticios,