Convenio multilateral de la OCDE en materia impositiva.
Los convenios para evitar la doble imposición son tratados internacionales firmados entre dos estados que tratan de evitar la posible doble imposición que se puede producir cuando el residente en un estado obtiene rentas en el otro estado, y ambas administraciones se consideran competentes para gravar la renta obtenida.
La suma de legislaciones internas diferentes, unida a los múltiples convenios siempre bilaterales, aunque siguen mayoritariamente el modelo de la OCDE, da lugar a una maraña de reglas que frecuentemente son aprovechadas para diseñar estructuras que consiguen eludir o reducir artificialmente la tributación.
Últimamente es frecuente escuchar referencias a la “erosión de las bases del Impuesto sobre sociedades” o a la “panificación fiscal agresiva”. Son ecos de la terminología empleada por la OCDE en sus informes e iniciativas encaminada a poner algo de orden en este ámbito.
El convenio firmado el día 8 de junio en París tiene la particularidad de superar al ámbito bilateral, en tanto en cuanto ha reunido a 76 países que, con las -no pocas- formalidades que requiere la materia modificarán sus convenios bilaterales – más de 1.000- en el sentido acordado sin necesidad de negociar punto por punto.
Las medidas incluidas en el nuevo Convenio Multilateral se refieren, precisamente, a los mecanismos híbridos, al abuso de los tratados, al tratamiento de los establecimientos permanentes y a los procedimientos amistosos para resolver las controversias que produzca la aplicación del convenio, al tiempo que se incluye una disposición facultativa sobre el arbitraje obligatorio y vinculante aceptada por 25 países firmantes.
Se prevé que las primeras modificaciones acometidas en los convenios fiscales bilaterales entren en vigor a principios de 2018.
Pueden parecer temas lejanos, pero están más cerca de lo que podría pensarse, no solo por la influencia de las transacciones internacionales en la recaudación tributaria (piense dónde compraba hace diez años y dónde compra ahora) sino por la transposición en la normativa interna de estas medidas.
Sabido es que cuando la autoridad se mosquea, termina dando una patada a las multinacionales… en el culo de las pymes.